MICROJUSTAS EQUIS PALOTE PALOTE - LA SORTIJA I

Para esta edición de las microjustas tenía decidida una máscara con una cierta ascendencia celestial, a la que incluso ya había presentado en la taberna antes de que empezaran las hostialidades, pero el descenso de los jueces al inframundo y la furtiva aparición de Venkman (una máscara anterior de Invierno) me hizo trasmigrarme en Ray, a fin de dar caña al trío calavera, algo que evidentemente no ocurrió, pese a la inestimable ayuda de Moquete (Bote)... Bueno que me lío. Que al final, en ese momento de crisis de todas mis justas (entre que soy eliminado en primera ronda y arrancan las demás competiciones) en un intento de buscar inspiración, aunque tuviera que ir al cielo a buscarla, );-P , rescaté el disfraz de santurrón para la Sortija.


Y aquí viene la primera de las andanadas versiculares del Señor de las llaves.

Dado que son unos cuantos, y para evitar mareos googlenianos, transcribiré debajo de cada relato el versículo que le da título.
Como siempre la palabra que da el tema viene de la última del relato que colgó el justero anterior (entre paréntesis).




Juan 20:24 (palabra entender)

—No me entiendes Tomás. Yo, sí que te quiero. Y si tú me quisieras también no me pedirías eso. ¿No me crees acaso? ¿No confías en mí?
—Anda, ven para acá, que no tienes rollo ni nada.

Aquí se me notaba la falta de soltura en el sacerdocio, en realidad debí decir Juan 20:25:
Le dijeron, pues, los otros discípulos: Al Señor hemos visto. El les dijo: Si no viere en sus manos la señal de los clavos, y metiere mi dedo en el lugar de los clavos, y metiere mi mano en su costado, no creeré.

Apocalípsis 9:8 ( palabra dentadura)

El jardín de las delicias se tornó callejón; la fruta colgada, lúgubre ropa tendida; la primavera de su abrazo, desabrido otoño; su cabello acariciado, alambre espino; su boca todo dientes.

Y tenían cabellos como cabellos de mujeres; y sus dientes eran como dientes de leones.


Eclesiastés 3:20 (palabra todo)

La mortecina luz que se filtraba apenas conseguía arrebatar algo de color.
Un fino manto de ausencia cubría los muebles, las estampas familiares sobre el anaquel, medio centenar de libros en un rincón, los enseres de la cocina, la escalera al fondo, mi alma en el retorno.

Todo va a un lugar; todo es hecho del polvo, y todo volverá al mismo polvo.


Génesis 28:20 (palabra bicicleta)

Paso por que trate de cogerme la mano en el parque. Paso por jugar a la familia, si no están mis amigos; por ponerles nombres a los hijos que dice que tendremos; por todo. Pero de ahí a llevar en el manillar un “papá no corras”.

E hizo Jacob voto, diciendo: Si fuere Dios conmigo, y me guardare en este viaje donde voy, y me diere pan para comer y vestido para vestir,


Lamentaciones 4:8 (palabra tiempos)

Desde siempre os he hecho creer, os he hecho morir, os he dado esperanza, os he engañado. Os he capitaneado igual que os he susurrado al oído invisible. Me habéis seguido y me habéis perseguido; pero sois muy pocos los capaces de verme en la oscuridad sin alma.

Oscura más que la negrura es la forma de ellos; no los conocen por las calles. Su piel está pegada a sus huesos, seco como un palo.

Marcos 14:23 (palabra hipo)

Y tomando la copa, habiendo dado gracias, la pasó a Pedro que la bebió de un trago, por el lado opuesto, mientras contaba hasta diez. 

Antes de que amaneciera, negó por tres veces haberse acabado él el vino.

Y tomando la copa, habiendo dado gracias, les dio; y bebieron de ella todos.

Génesis 19:24 (palabra sulfuroso)

Abajo el coche en marcha, mi pareja, las mochilas en el maletero. Y entre el horizonte de este largo puente y nosotros solo los dos minutos que faltan para la campana.

Suena el teléfono, la línea directa, teléfono rojo.

Y encima me dice que no me sulfure.

Entonces el SEÑOR hizo llover sobre Sodoma y Gomorra azufre y fuego,

Lucas 13:14 (palabra seis)

No ha leído la última circular, veo. Es por personas como usted que el país está como está. Egoístas e insolidarios. Inconscientes de la realidad que vivimos. Desagradecidos de la vida. No insista, lo siento, la norma es clara: hasta después de las seis no se puede morir.

Pero el oficial de la sinagoga, indignado porque Jesús había sanado en día de reposo, reaccionó diciendo a la multitud: Hay seis días en los cuales se debe trabajar; venid, pues, en esos días y sed sanados, y no en día de reposo.

Génesis 25:21 (palabra mujer)

Por fin entre mis brazos; no quepo en mí de gozo. Después de tantos años ya habíamos perdió la esperanza, realmente es un milagro. Por tanto tiempo se había sentido yerma, vacía, al no quedar encinta. Míralo, es perfecto, aunque, esa nariz, ¿de dónde habrá sacado esa nariz?

Y oró Isaac al SEÑOR en favor de su mujer, porque ella era estéril; y lo escuchó el SEÑOR, y Rebeca su mujer concibió.

Juan 6:55 (palabra cocina)

Se veía tan apetecible, que tuve que comérmelo crudo.

Porque mi carne es verdadera comida, y mi sangre es verdadera bebida.

Job 15:25 (palabra vuelve)

La quinta vez que lo resucitaron para guiar a su rebaño hasta la Gloria del Padre, ya creía mucho más firmemente en el libre albedrío.

El no cree que volverá de las tinieblas, y que está destinado para la espada.

Hebreos 11:30 (palabra alrededor)

Cuando las cárceles estuvieron llenas de toda la gente que rodeaba el congreso, los bancos, los ayuntamientos, las cámaras de comercio, las sedes de los partidos, la bolsa; por fin, por fin todos los ladrones quedaron encerrados fuera.

Por la fe cayeron los muros de Jericó, después de ser rodeados por siete días.

Daniel 6:21 (palabra rey)

Playita, palmeras, hamaca y daiquiris. Y tranquilidad, sobre todo tranquilidad. Estoy en el paraíso por fin. Mientras no me descubran. El otro día no pude evitar un golpe de cadera cuando en el chiringuito sonaba “Don’t be cruel”

Entonces Daniel respondió al rey: Oh rey, vive para siempre.

Jueces 16:25 (palabra burlarlo) (pisado)

McKencey no cejaba en los saltos y cabriolas esquivando las balas de los hombres de Garrett, que le jaleaban entre risotadas. Tan enfrascados estaban en hacerle bailar que no notaron el estiramiento de la comisura de sus labios cuando recordó el frasco vaciado en el depósito del agua.

Y sucedió que cuando estaban alegres, dijeron: Llamad a Sansón para que nos divierta. Llamaron, pues, a Sansón de la cárcel, y él los divertía. Y lo pusieron de pie entre las columnas.

Mateo 1:20 (palabra casero)

María depositaba, con mimo, en el jarrón de la mesita de su pequeño apartamento las flores le aparecían en la puerta cada mañana; luego bajaba saltarina a hacer la colada al sótano, del que no subía, hacendosa, hasta bien pasadas un par de horas. Mientras, José dormía plácidamente. 

Pero mientras pensaba en esto, he aquí que se le apareció en sueños un ángel del Señor, diciendo: José, hijo de David, no temas recibir a María tu mujer, porque el Niño que se ha engendrado en ella es del Espíritu Santo.

Hasta aquí la primera encíclica, pronto más.