Si siente esta necesidad, dirigirse una zona de bosque bajo, tendiente al claro, en el que buscará un lugar cómodo. Elegir un lugar umbrío o soleado en función de la estación. Esperar pacientemente el momento adecuado (puede aprovechar la espera para encontrarse a sí mismo, para perderse, o absolutamente para nada).
Para reconocer el instante permanezca atento a las señales:
- Las briznas de hierba, hará algunas lunas que presentarán una pátina dorada.
- Los días durarán aproximadamente lo mismo que las noches.
- Las mañanas aun serán calurosas, pero al mediodía empezará a percibir ligeras variaciones barométricas en algunas articulaciones, la mente se le irá cubriendo de un velo cada vez más pesado que formará en el cielo gruesos nubarrones que coronarán las tardes en aguacero.
- En las noches que se abra el cielo podrá disfrutar de Libra en su protagónico punto vernal.
Fragaria Vesca |
Una vez confirmadas al menos dos de estas señales, entre el pasto, o próximo a arbustos de mayor porte, localizará la planta, sin hojas en el tallo y coronada por un trilobulado conjunto de bordes dentados, verde brillante, más claro en el envés. Trazando las medianas desde los vértices de estos conjuntos, encontraremos su baricentro de donde habrán brotado sendos apéndices, en cuyos extremos unos sutiles decángulos estrellados, escombros de la flor que fue, engarzarán el eterio encarnado.
Tomar uno suavemente entre los dedos. Puede cortar el tallo, un centímetro por debajo del sépalo, le servirá de soporte para las próximas maniobras.
Si dispone de agua fresca, espolvorearla por la superficie del fruto. Una vez irrigada introducirla en la boca hasta tres cuartos de su longitud. Presionar cariñosamente los dientes hasta vencer la resistencia superficial. En este punto detenerse, saborear los aromas que estarán asaltando en este momento su espacio buconasal, le podrán recordar a algunos tipos de vino, según dicen. Recoger las primeras gotas que destile la prensión y permitir que éstas recorran los bordes de la lengua para apreciar su acidez. Seccionar y demoler la parte introducida regándola generosamente por toda la cavidad a fin de reconocer el resto de rango gustativo.
Repetir los pasos de los dos últimos párrafos hasta agotar existencias o quedar saciados, lo primero que suceda.
¡¡Muchísimas felicidades amigo!!
ResponderEliminarBello diploma para estas intrucciones tan claras. Ahora mismito me voy a ponerlas en práctica :) y si quedo saciada de tan suculento alimento te lo haré saber.
Me alegra mucho tu diploma, y ya sabes queme gustan los relatos algo más largos que los micros, así que...¿qué puedo decir?... pues que he quedado ¡satisfecha!.
Un besote amigo.
Gracias guapa. la verdad es que el diploma lo dan por participar, como en las competiciones escolares, pero queda molón ahí colgado, je je.
EliminarMe alegro de que el relato te haya saciado, es verdad que el formato en cien palabras a veces se queda corto, pero cuesta salir cuando te lías en ese círculo semana tras semana, para mi esta medida está muy bien.
Un besazo amiga Laura, seguimos capeando la canícula.
!!Enhorabuena!!
ResponderEliminarMerecido diploma, muy buena explicación; tomo nota.
Uhmm,como me gustan las fresas je je.
Un besazo Miguel.
Pues aprovecha que es momento, je je.
EliminarUn besazo Yolanda, gracias.
En este hemisferio, cambiando Julio por Septiembre, más o menos le debería funcionar, desconozco en su ubicación la constelación que gobierna el granado de la vid.
ResponderEliminarAbrazos desde Barcelona.
Enhorabuena, padrino, no solo por el diploma sino por el relato, que, con permiso de Cortázar, tiene ese toque entre absurdo y lógico de las joyas como "Instrucciones para subir a una escalera".
ResponderEliminarPues yo pago otra más a tu salud
Juan M
No pude evitarlo compañero, es lo que tiene escribir mientras revolotean a tu alrededor cronopios y famas, je je.
EliminarVenga, la tercera a mi cuenta. Hoy acabaremos mal, je je, feliz viernes.
Miguel muchas fresas debes de haber comido. Saborea mi sincero y respetuoso adjetivo GENIAL.
ResponderEliminarJe je, pues te digo, que para la fruta soy más de teoría que de práctica, pero me fijo mucho en las que me como.
EliminarGracias Mamen.
Un abrazo.
más allá de las ganas que tengo de comer fresas en este momento, quiero felicitarte porque me pareció excelente. De un buen gusto muy particular. Felicitaciones
ResponderEliminarte dejo mi abrazo
Gracias Laura.
EliminarAbrazo correspondido.
Pues qué ricas! Algún día investigarás porqué nada que tenga sabor a fresa (como los yogures o los batidos, o los zumos), sabe realmente a fresa. Mientras tanto me quedo con esto, que sí refleja la estupenda, la veraz, la increíble sensación de comer fresas.
ResponderEliminarUn abrazo, con la piña es mi fruta preferida! : )
Tendrá que ver, Alba, con que: las cosas para lavar, para perfumarse, para... están hechas todas con aromas naturales, y luego no quedan par las cosas de comer.
EliminarMe alegro de que te gustara, si conseguí transmitir eso, ni que sea un poquito, me doy más que por satisfecho.
Abrazo de piña y fresas.
He seguido todos los pasos finales y ha funcionado a la perfección, gracias. Respecto a los primeros, los he sustituido por comprar una caja en el supermercado. Lo otro me daba pereza y -además- prefería no encontrarme a mí mismo. Por si acaso.
ResponderEliminarIngenioso. Salud-os
Me alegra haber sido útil Amando. Aunque lo de haber ido al super... Ya no se cogen fresas como antes, inchs!
EliminarY por lo otro no te preocupes, si te veo buscándote te diré que te has ido por el otro lado.
Salud-ando
Es un relato muy embriagador. Me gusta.
ResponderEliminarGracias Miguelángel.
EliminarUn saludo.