Relatos desencadenados 2012-2013
Mi apuesta de la semana 18 para "relatos en cadena". Lástima que no me lo seleccionaran, éste ya venia con su música predestinada, je je.
EASY RIDER
Desde la habitación de su hermanita a la puerta de entrada,
kilómetros de asfalto por devorar. A la grupa de su montura, de gran cilindrada
siempre, tres ruedas, con las dos no se apaña. Casco motard, de lana trenzada
en punto grueso y borla en forma de flor, firmemente asegurado al cuello
con un botón de plástico marrón jaspeado que quiso ser de carey. Gafas caladas
para el viento, demasiado anchas y montura gruesa, hurtadas a la camarera del
bar de carretera que se abría, segunda puerta a la izquierda, donde a veces
paraba a descansar. Y a modo de capa el tapete de ganchillo de la máquina de
coser, una licencia poética que había decidido permitirse.
Y mañana el resultado de esta semana y la nueva frase de inicio para la siguiente en la Ventana y en la página de la "escuela de escritores".
¡ojo! , no lo pare la guardia civil en el pasillo , con los brazos en jarra y lo multen por dañar el parquet. jeje. muy bueno. un abrazo
ResponderEliminarNo se como está el limite de colacaolemia en pasillos, mejor que se ande con cuidado, je je.
EliminarAbrazo xiket.
Para carrera difícil, la de los concursos literarios... Bueno, te felicito, aunque no lo seleccionaran, y me voy al bar, segunda puerta a la izquierda, a tomar un vinito. Abrazo.
ResponderEliminarAhí vamos, amontonando letras, leyendo más de lo que escribo e intentando aprender de todos vosotros. Lo de los concursos es la excusa para obligarme a producir, pero ya que se está a nadie le amarga un telefonazo, je je.
EliminarNos vemos en el bar.
Un abrazo.
Yo de mayor quiero ser miembro del jurado. Para darte a tí el premio por este micro y más tarde, a la grupa de tus 3 ruedas acompañarte sobre el asfalto. Me conformaré con que me lleves a ese bar de carretera donde destilan los mejores caldos. Un beso.
ResponderEliminarGracias Piel, en la barra ya hay preparados dos vasitos de zumo, y después, después el horizonte será el límite.
EliminarJe je.
Un besazo.
Está muy bien esa licencia poética. Me has recordado y precisamente lo comentaba hoy a una amiga, la de saltos que he ido dando por los pasillos y alguna habitación, cuando mi hijo era pequeño y montaba sus clis de Playmobil y me cogía pañitos, trapos de plancha o cualquier cosa para recrear sus batallas y juegos y él mismo ser algún héroe de la aventura que tocaba.
ResponderEliminarBesicos muchos.
Y quien no ha querido ser alguna vez ese héroe, con la capa de ganchillo, con la tapa de cubo de la basura a modo de escudo, y como espada el bastón del abuelo, je je.
EliminarUn besazo Nani.
Me acabo de enamorar de tu motero, qué cosa más tierna ese "angelito del infierno". Me encanta la ilustración que le has puesto (ya he visto "Up" dos veces.)Es precioso tu relato. Al concurso le debemos pequeñas joyas como esta tuya a partir de escenas que seguramente nunca nos habríamos planteado.
ResponderEliminarUn abrazo
Desde la primera palabra, la imagen que tenía era la de esos trastos desdentados, que fuimos algún día, capaces de volar sentados en una silla de mimbre. Y enseguida. Neus, mi compañera, me hizo recordar dónde habíamos visto a dos personajillos que encarnaban ese espíritu, je je.
EliminarMe alegro de que te guste Nieves, gracias por el comentario.
Un abrazo.
Bueno con musica y todo, viendo estos micro relatos jeje, se le qitan las ganas a una humilde dama de escribir jeje. yola
ResponderEliminarEs que no podía ser de otra forma, según iba escribiendo oía la canción dentro de mi cabeza, esta vez la banda sonora era obligada.
EliminarY de quitar las ganas nada, escribir, escribir y escribir, humilde dama, je je, que yo también quiero leerte.
Un abrazo Yola.