Relatos desencadenados 2014-2015
Para la 30 del ReC, una visita muy especial. Hay oportunidades que no se pueden dejar pasar...
Farándula
La inquisición no tardará en llegar, apúrate. Ponte recta esa gorguera, que pareces un espantajo. Toma, la biblia que nos dejó el abuelo. Procura causar buena impresión, no todos los días se presenta la oportunidad de entrar de aprendiz en el santo oficio. Ya le puedes estar agradecido al tío Nicolás. Quién iba pensar que el viejo fraile al final serviría para algo más que comerse nuestra caza y beberse nuestro vino. Deja que te peine. Estate quieto…
Aquel: mamá, yo lo que quiero es ser trovador, quedó flotando, como colgado del silencio, hasta que el pescozón lo mandó de vuelta a la tierra.
Ahora con banda sonora, je je.
La inquisición no tardará en llegar, apúrate. Ponte recta esa gorguera, que pareces un espantajo. Toma, la biblia que nos dejó el abuelo. Procura causar buena impresión, no todos los días se presenta la oportunidad de entrar de aprendiz en el santo oficio. Ya le puedes estar agradecido al tío Nicolás. Quién iba pensar que el viejo fraile al final serviría para algo más que comerse nuestra caza y beberse nuestro vino. Deja que te peine. Estate quieto…
Aquel: mamá, yo lo que quiero es ser trovador, quedó flotando, como colgado del silencio, hasta que el pescozón lo mandó de vuelta a la tierra.
Ahora con banda sonora, je je.
Menuda oportunidad Miguel, aunque entiendo al muchacho, vivirá frustrado para siempre como tantos otros.
ResponderEliminarMe gusta tu intento. Saludos.
Nah! seguro que encuentra la manera de dar salida a ese furor creativo. ¿Te imaginas los juicios de la santa inquisición, en plan película de Disney? je je.
EliminarSaludos, Yashira, gracias.
¡Pobre! No hay como un buen pescozón de madre para bajarte de un sueño por la vía rápida.
ResponderEliminarBuen micro. Un abrazo
No hay nada en este mundo más cargado de apabullante realidad, je je.
EliminarAbrazos, Nieves, gracias.
Tú siempre con regates que nos pintan la sonrisa tierna. Veryfantuya, osito. Besos anfibios.
ResponderEliminar);-P
EliminarLo de la inquisición es lo bastante serio como para necesitar un poquito de salsa para hacerlo pasar.
Besos de oso.
¡Cuántos coscorrones de estos habrán frustrado más de alguna mente talentosa.. que pena!
ResponderEliminarUn desperdicio total, je je.
EliminarSaludos, Henry.
Qué manía tienen los que no sueñan de arrastrarnos a su áspera realidad, oiga. Con lo que me gusta a mí tener la cabeza en las nubes.
ResponderEliminarMil besos.
Ellos se lo pierden, bastante tienen con lo suyo: una vida pegados al suelo todo el tiempo, je je.
EliminarBesos Izaskun.
Trovador, trovador... Ya le enseñaremos nosotros la poesía que dejan los potros de tortura. Admitido.
ResponderEliminarFirmado: Fray Tomás de Torquemada
Abrazos, siempre
La lírica de los huesos al romperse... Lo que pasa es que son unos zafios insensibles, je je.
EliminarSiempre abrazos.